viernes, 13 de mayo de 2016

Culo veo, culo quiero

Publicado en La Voz de Galicia (Edición Ourense)el 8 de Mayo de 2016 



En la mayoría de las ocasiones pensar con el corazón nos hace perder la perspectiva. Está claro que por razones geográficas Ourense tiene que ser la puerta de entrada y salida de Galicia hacia la península, es por ello, que el núcleo central del AVE en Galicia debe ser la estación empalme de Ourense.

Ahora bien, ser el nudo central de AVE, no implica que este nuevo medio de transporte nos vaya a solucionar los problemas económicos y convierta, por arte de magia, a nuestra ciudad en referencia turística e industrial a nivel nacional e internacional. La única manera de conseguir ser referencia en cualquier mercado, sea el que sea, siempre será a través de la suma de múltiples factores, como son los buenos medios de comunicación y transporte, la cultura empresarial, la variedad de infraestructuras hoteleras y turísticas de calidad... Por mucha súper consultora, contratada por las administraciones, que han intentando vendernos los números y supuestos beneficios casi automáticos de la línea de alta velocidad para nuestra economía, hay cosas que se caen por su propio peso. Por ejemplo, estamos a menos de una hora de A Coruña en tren, pero es casi imposible llegar a los polígonos industriales sin alquilar un coche o utilizar un taxi; esto provoca que el ahorro económico y de tiempo del tren se pierdan por la mala planificación del transporte interurbano y la poca o nula señalización informativa en las estaciones de tren y autobús sobre los núcleos industriales.

Si pensamos en Ourense como una empresa y una marca comercial, no podemos olvidar una de las premisas fundamentales del cualquier negocio, lo difícil no es conseguir que el cliente nos visite por primera vez o haga la primera compra, lo realmente complicado es conseguir que vuelva y se convierta en un cliente recurrente. Para ello, debemos ser más que una bonita y costosa estación de tren. Reflexionando fríamente, es necesario invertir cientos de millones de euros en una infraestructura como la estación de Ourense? Pues casi nunca será estación inicial o final de ruta, y el viajero permanecerá de media menos de quince minutos en ella.


Cierto es que, por desgracia, en esta nuestra ciudad muchos políticos e instituciones son como una gran parte de la población, muy de aparentar y de dar una imagen muy superior a sus posibilidades, aunque luego no tengan para comer o vivan de las patatas y los huevos que dan los abuelos del pueblo. Debemos pensar si es tan importante tener una estación de diseño o, si objetivo es conseguir dotar a Ourense de todas las infraestructuras y medios necesarios para conseguir ,que el AVE sirva de punto de entrada de turismo y negocios, y no en la vía de escape de nuestra población hacia otras ciudades más grandes. Lamentablemente, la realidad nos está demostrando que la única forma de reivindicar, de ciertos sectores de la sociedad de esta ciudad, es por medio de la famosa técnica de la envidia y del "Culo veo, culo quiero".