lunes, 23 de marzo de 2015

Estar o no a la moda

Publicado en La Voz de Galicia (Edición Ourense)el 22 de Marzo de 2015 


Desde un tiempo hasta hoy se ha ido creando la burbuja de la internacionalización. Como en todas las burbujas, el entorno político y económico incentiva su crecimiento y nos hacen creer que el único camino correcto es seguir la corriente, parece que si no estás internacionalizado no estás a la moda. Pero ojo con las modas, no nos olvidemos de la burbuja del emprendedurismo de hace un año, todo el mundo hablaba de emprendimiento y hasta se hizo una ley del emprendedor; pero, por desgracia, como todas las modas vienen y se van.

Para que las empresas puedan estar a la moda, desde los diferentes organismo ofrecen estudios sobre las capacidades de internacionalización, ayudas para presentarse a multitud de licitaciones internacionales, en organismos en los que solo leer sus siglas ya asustan: Banco Mundial, Banco Internacional al Desarrollo… Pero realmente ¿es necesario que todas las empresas exporten? Esta es una pregunta que nos deberíamos hacer antes de aplicar políticas económicas y financieras.
Cierto es que, las empresas que han sido capaces de internacionalizar sus carteras, han superado mucho mejor la crisis. Pero una pequeña empresa que se dedica al mercado local o autonómico, es necesario que venda en América Latina o podríamos pensar que vender en Madrid, ocupando el hueco dejado por otras compañías, ¿es exportar?.

Como en todas las modas hay tendencias, en la internacionalización está el concepto de exportación. Muchas compañías confunden exportación con deslocalización, es decir, sigo facturando desde Ourense pero los centros productivos están implantados en terceros países. No debemos olvidar que únicamente se podrá generar riqueza en la provincia, por la vía de la exportación, a través de los centros productivos implantados en nuestras áreas industriales , puesto que será la única manera de generar un efecto atracción sobre otras empresas, puestos de trabajo y en consecuencia incentivar nuestro mercado local.


En Ourense, quizás deberíamos pensar que antes de invertir en ponernos a la última moda con la internacionalización. Igual es mucho más importante invertir en un fondo de armario, fomentando a que las empresas puedan modernizar sus cadenas productivas para poner en valor sus productos y servicios, incentivando el efecto arrastre entre clientes y proveedores, y generar una estructura empresarial mucho más fuerte y consolidada dentro de la provincia. Al mismo tiempo, se debería incentivar las alianzas empresariales, realizando un esfuerzo en modernización de infraestructuras con el fin de facilitar la logística y las comunicaciones de las empresas. Como todo en esta vida antes de ir a la última moda primero debes tener los básicos. 

lunes, 9 de marzo de 2015

Cambios en la remuneración de los administradores

Publicado en el suplemento EURO de La Región y Atlántico Diario el 8 de marzo de 2015

Teniendo en cuenta que somos un país en el que, cada seis días, se publica en el BOE una disposición en términos de fiscalidad, no es de extrañar que algunas modificaciones que afectan a la gran mayoría de sociedades mercantiles se nos pasen, y como bien sabemos, cuando llega Hacienda para abrir un acta nos aplica que “el desconocimiento de una ley no exime de su cumplimiento”.

La nueva Ley de Sociedades de Capital, entre las muchas modificaciones que realiza, encierra una de gran efecto en las Sociedades Limitadas y Sociedades Anónimas no cotizadas. Esta reforma intenta concretar algún tema que anteriormente no quedaba demasiado claro, estoy hablando de la remuneración de los administradores en su condición de administrador, es decir, debemos diferenciar claramente cuando se ejerce de administrador y cuando se ejerce una actividad profesional.

A día de hoy, en estatutos, si no se dice lo contrario, el cargo de administrador es no remunerado, pero ¿qué sucede en el caso de los Consejeros Delegados? Lo que nos dice la ley es que cuando un miembro del consejo de administración sea nombrado consejero delegado o se le atribuyan funciones ejecutivas en virtud de otro título, deberá suscribirse un contrato entre éste y la sociedad. El contrato debe contener todos los conceptos por los cuales pueda recibir una retribución por el desempeño de funciones ejecutivas ,incluyendo la indemnización por cese de funciones. Asimismo, la ley establece que el consejero no podrá percibir ninguna retribución por un concepto que no esté incluido en dicho contrato.

Tras esta lectura, queda muy claro cómo plantear la reforma para sociedades con un consejo de administración. Pero qué sucede con los administradores únicos, administradores mancomunados o solidarios y dando una vuelta de tuerca más, ¿qué sucede con los profesionales que se establecen por medio de una sociedad mercantil y son administradores de la misma? Parece ser que estos deberán facturar a la sociedad por la prestación de servicios que realizan para ella, con toda las implicaciones formales, administrativas y fiscales que supone.

Como casi siempre, una reforma legislativa crea un mar de dudas y de implicaciones que causarán más dolores de cabeza a los empresarios, que ya tienen bastante, en muchos casos, con sobrevivir día a día. En definitiva, todos hemos de revisar nuestros estatutos y establecer que el cargo de administrador puede ser remunerado, con el consiguiente paso por notario y registrador, con el consiguiente desembolso económico, nunca imputable a la actividad de la sociedad pero sí a la no legislación mercantil y fiscal española, con su grandísima capacidad de generar leyes, modificaciones… pero casi nunca capaz de unificar y simplificar.


martes, 3 de marzo de 2015

Bollo de Chelsea




El origen de estos famosos bollos está en Chelsea, en el área central de Londres. Creados por la Chelsea Bun House en el siglo XVIII, eran degustados por los miembros de la alta sociedad británica, al igual que un bollo típico de Pascua, el hot cross buns (espero hacerlo un día de estos y mostrároslo aquí).

El bollo no deja de ser una masa similar a la de brioche rellena de pasas, enrollada, cortada en trozos y montada de la forma que véis en la foto. 
He realizado este tipo de bollo en varias ocasiones, siguiendo distintas recetas, pero en esta ocasión me ha quedado superesponjoso. A qué se ha podido deber? pues a una dosis de paciencia y un amasado manual. En qué he invertido la paciencia, en seguir con el amasado hasta conseguir que la masa quedara lisa y se cumpliera la prueba de la membrana. Los que sois de hacer masas en casa, ya sabéis a qué me refiero, y para los que no, os dejo este enlace para que podáis ver en qué consiste. Qué garantizamos al llegar a este punto de la masa? Con el amasado se consigue crear una red de gluten, donde se va a sostener los gases procedentes de las fermentaciones. Cuanto mejor sea esa membrana, mejor retención de los gases, y nos dará como resultado una mayor esponjosidad de la masa. 


Por lo tanto, no debemos dejar de amasar hasta que no lleguemos a obtener la membrana, y este proceso lleva tiempo.  Otra forma de obtener un desarrollo del gluten, es dando reposos a la masa, pero el proceso se va a alargar bastante. He amasado 5 minutos y dejo reposar otros 5, así hasta llegar al punto deseado. 

Podéis utilizar amasadoras si os parece un engorro amasar a mano, lo ideal es amasar y reposar la masa. 
Si sois principiantes en la elaboración de masas, la cantidad de esta receta es ideal para practicar, ya que no es demasiada cantidad para amasarla.
En esta ocasión me he basado en la receta que aparece en el libro "Un dulce en Londres" de Amelia Wasiliev. Te permite conocer la repostería británica, pero he detectado varios errores en los textos, en cuanto a los ingredientes que, en el caso de la repostería, ya sabéis que es fundamental que esté todo bien medido y detallado. En esta receta, por ejemplo, no aparece detallada la cantidad de azúcar, y sé que lleva un huevo porque lo detalla en la elaboración. Seguiremos buscando libro de repostería británica. Si alguien me puede recomendar alguno, dejadme un comentario, jejejeeje.

Venga! Animaros a probar, si superáis esta prueba, podréis meteros de lleno a elaborar masas de todo tipo.

Ingredientes:
        
    Para los bollos:
      250 g harina de fuerza
      1 cucharadita de levadura panadero en polvo
      1 cucharadita de sal
      4 cucharadas de azúcar
      20 g de mantequilla
      150 ml de leche tibia
      1 huevo batido

   Para el relleno:
     30 g de mantequilla
     50 g de azúcar moreno
     80 g de pasas 
     1 manzana pelada y rallada 

  Para la decoración:
    3 cucharadas de azúcar y 2 cucharadas de agua, para hacer almíbar.
    3 cucharadas de azúcar y 1 cucharadita de canela, para espolvorear una vez horneado.

El libro recomienda un molde cuadrado de 23 cm de lado. yo he utilizado un molde redondo de 23 cm de diámetro.

En un bol grande mezclar la harina, el azúcar, la levadura y la sal. Añadimos la mantequilla y empezamos a amasar, vertemos los ingredientes líquidos (leche y huevo). Cuando tengamos integrado todo, lo sacamos del bol a una superficie enharinada, donde empezaremos a amasar hasta llegar a obtener una masa lisa y elástica (ya os he explicado arriba que debemos llegar a superar la prueba de la membrana, ánimo y venga a amasar, amasar, amasar, jijijiji).

Colocamos en un bol previamente aceitado, y lo cubrimos con papel film, también engrasado para que no se quede pegado a la masa. Dejamos reposar en lugar cálido y libre de corrientes, hasta que doble el volumen.

Preparamos el relleno. Derretimos la mantequilla con el azúcar en un cazo, lo sacamos del fuego y añadimos las pasas y la manzana. Dejamos enfriar.

Extendemos la masa hasta obtener una masa rectangular de aproximadamente 30x23 cm. Repartimos el relleno por todo el cuadrado dejando libre 2cm de uno de los lados más largos. Enrollamos, partiendo de uno de los lados más largos hacia el que hemos dejado libre, que debe estar mojado para que se pegue ese lado y no se abra. Cortamos el rollo en 9 trozos más o menos, y montamos el bollo en el molde, previamente engrasado. Debe dejarse hueco entre los trozos, ya que ahora dejaremos reposar hasta que doble el volumen, más o menos 1 hora en lugar cálido, y se quedaran pegados.

Precalentamos el horno a 180º  y hornemos durante 15-20 minutos, hasta que lo veamos dorados. Comprobamos con un palillo, antes de sacarlo, que debe salir limpio.

Una vez fuera del horno, sacado del molde, pincelamos con el almíbar hecho con azúcar y agua. El almíbar lo hacemos en un cazo, y dejamos que se disuelva el azúcar y dé un hervor. Finalmente espolvoreamos con el azúcar y canela mezclados.

Nos vemos en la próxima entrada.

Biquiños 

Eviña´s World


lunes, 2 de marzo de 2015

Doble Moral

Publicado en el Suplemento Mercados de La Voz de Galicia el 1 de Marzo de 2015 

Desde siempre he pensado que los reyes de la doble moral eran los Estados Unidos, siempre hablando de lealtad, familia, religión y luego son los reyes de las guerras, pornografía y trabajos sucios. Ahora empiezo a tener muchas dudas sobre su reinado, creo que en Europa están existiendo bastantes candidatos a ocupar el trono, si hablamos en términos económicos.

Si hablamos de reestructuración y condonaciones de deuda, no podemos olvidar, que Alemania, el gran defensor de la austeridad y de los recortes, es el país que tiene la reestructuración más importante la historia moderna de Europa. Recordemos el Acuerdo de Londres de febrero de 1953, por el cual se condonó la mitad de los 30.000 millones de marcos de deuda de la República Federal de Alemania. Para el resto de deuda se acordó un periodo de carencia, condicionado a la unificación de las dos Alemanias, es decir, 37 años. Finalmente, también se estableció que sólo se devolverían si tenían superávit comercial, y que los reembolsos nunca podrían ser superiores al 3% de las exportaciones alemanas. Está claro que, muchas veces, ciertos países no tienen memoria histórica, puesto que España, Irlanda y Grecia perdonaron deuda a Alemania y que el último pago de deuda se realizó en octubre de 2010, casi 60 años.

Sin meternos en la mala gestión de los dirigentes bancarios y sus malas artes como profesionales, que no buscaban el beneficio de las entidades a las que representaban, sino que tan solo buscaban su propio beneficio y lucro.

El rescate europeo a la banca española o irlandesa, también ha sido un claro ejemplo de doble moral. España fue fuente de durísimos ataques por la prensa internacional, poniendo en duda la credibilidad del sistema financiero, al Banco Central y a los diferentes gobiernos españoles, dando igual el color político que tuvieran. A modo de ejemplo, podríamos decir que el rescate de las entidades norteaméricas Citigroup y Bank of America fueron superiores a los 34.000 millones de euros cada uno, y que el programa de restructuración norteamericano superó los 185 mil millones de euros, sin tener en cuenta los casos Lehman Brothers, AIG… Pero, como siempre, nuestro gran candidato al reinado de la doble moral vuelve ser Alemania, puesto que sus dos principales banco hipotecarios, el Commerzbank e Hypo Real Estate, han sumado ayudas por importes superiores a los 40 mil millones de euros; además, no debemos olvidar el ocultismo de las famosas cajas de ahorro alemanas.

Está claro que, hoy en día, ciertos países tienen una posición dominante y otros tenemos una posición sumisión, pero nunca se debe olvidar que para dar lecciones hay que tener humildad, nunca olvidar nuestro pasado y que algunas veces la situación se da la vuelta y eres tú quién pide ayuda el resto del mundo.

martes, 27 de enero de 2015

No sólo van a ser postres..Puré de calabaza

Como no solamente se vive de postres..sólo hay que subirse a la báscula para que te diga: "deja ya los dulces que la Navidad ya pasó y no hay excusas".

A mí personalmente no me gustan los purés, mi paladar no acepta esa textura cremosa tirando a líquida, no me gusta tomarlos como una sopa de fideos, no me entra. Pero a Luis le encantan, por lo que me propuse buscar una receta que no llevara componentes lácteos con gran porcentaje de nata o grasa (quesos curados, natas, quesos crema,..). Él "r que r" que eso no va a saber a nada, pues a la noche no probará.
Me he basado en la receta de la página Velocidad Cuchara, la receta de su Crema de calabaza está elaborada con Thermomix, así que para los que la tengáis, podéis seguir la receta tal cual. Yo me considero antithermomix, por lo que he cogido las cazuelas y la picadora y me he puesto a ello. 

La receta original utiliza zumo de naranja, pero yo lo he sustituido por caldo de pollo casero (tal y como lo recomienda en la página que os he detallado).

Ya paso a contaros la elaboración e ingredientes. Lo que más tiempo os va a llevar es pelar la calabaza y asarla.

Ingredientes:

     Caldo de pollo:
        1 esqueleto de pollo de corral, sin la piel y sin la grasa
        1/4 calabacín grande
        1/4 pimiento rojo
        1/4 cebolla

     Puré:
        1kg de calabaza
        un diente de ajo
        copos de cayena (es cayena en trocitos)
        una pizca de comino (poquiiiito)
        una ramita de perejil fresco
        sal al gusto

Lo primero es hacer el caldo de pollo. Cocemos todo en una olla de vapor, sobre 15 minutos. Una vez que esté todo cocido, sacamos del esqueleto la carne que tuviera, y la vertemos en el caldo con las verduras. Le pasamos la batidora para dejarlo todo integrado.

Cocemos la calabaza, previamente pelada, despepitada y cortada en trozos grandes, a 220º durante 30 minutos.

En la picadora ponemos el perejil, el ajo y el resto de especias (podéis añadir las que más os gusten).

En una olla con un poquito aceite ponemos el contenido de la picadora y lo dejamos un ratillo, añadimos la calabaza y la deshacemos con un tenedor, machacándola. Añadimos sobre 1/2 litro del caldo y hervimos. A mí me ha quedado un poco espeso, por lo que añadí un poco de agua para dejarlo más liquido. La textura la váis arreglando a vuestro gusto, añadiendo agua o caldo.

Lo servimos bien caliente con unos picatostes encima.

Espero que os guste. Buen provecho.

Eviña´s World

jueves, 22 de enero de 2015

Semana de bizcochos con #cursoonlinealiterdulcia



Por aquí ando de nuevo. En estos días me estoy dedicando al cuidado del enano, a organizar la casa, y a ir completando formación en este mundillo de la cocina. En este caso, llevamos un par de semanas del curso  de   #bizcochosperfectosaliterdulcia  y, por primera vez, creo que estoy sacando provecho de un curso online. Tenemos unos ejercicios obligatorios (la profesora no va a venir a tu casa a obligarte a hacerlos, pero si no se hacen, no tiene sentido inscribirse en un curso, no?). Quedan todavía dos semanas más y estoy deseando que nos envíe ya la siguiente receta. Espero hacer una entrada próximamente con lo que he realizado en el curso, para que os animéis a hacerlo (siguiendo las recetas y procedimientos conseguimos resultados buenos, pero el ingrediente principal es la paciencia).


Cambiando de tema, estoy intentando hacer hueco en los armarios de la cocina, y he visto que había un bote de leche condensada y coco rallado, que me estaban ya sobrando y, o los utilizaba, o directos al cubo de la basura (con la rabia que me da tirar con la comida, arrggg!!). Con la finalidad de hacer algo productivo con ellos,  he buceado por internet, consultando blogs que sigo habitualmente, y me he decido por un flan de coco. Me he basado en la receta de Flan de coco de la página Directo al paladar. Por qué he usado esta receta y no otras? Porque era la que mejor se adaptaba a las cantidades que tenía disponibles en casa. No he realizado las cantidades proporcionales a la receta, sino que, más bien, he ido a arriesgar y he añadido las cantidades según mi deseo, es decir, que no quedara nada sobrante de los productos que quería hacer "desaparecer". También he variado la forma de cocinarlo, en la receta se utiliza un baño maría en el horno, y yo me he decantado por hacer el baño maría en una cazuela en la cocina.


El caramelo que he utilizado para cubrir el bol lo hago yo misma, en una sartén (preferiblemente antiadherente) y, como no tengo la flanera, he utilizado un bol de aluminio redondo con las paredes altas (16cm diámetro y 10 cm de alto).

Aquí os dejo la foto de cómo ha quedado el flan. El coco, por su densidad, al cocinarlo ha quedado en la parte superior del flan, por lo que, al desmoldarlo, os quedará en el fondo.


Y ahora, ahí va la receta, ya me contáis si os ha gustado y lo habéis probado. Complicado no es, animaros!!

Ingredientes:

450 g. de leche condensada
5 huevos tamaño L

300 ml. de agua
125 g. de coco

Caramelo
100 ml de agua
150 g. de azúcar blanquilla


Preparación:

Mezclamos los huevos con la leche condensada hasta que esté perfectamente integrado, añadimos el coco y el agua. Batimos hasta que esté todo bien mezclado.

Realizamos el caramelo, para ello, ponemos el agua y el azúcar. Empezamos con fuego fuerte, y cuando empiece a hervir, bajamos el fuego; no lo dejéis a fuego alto ya que, o estáis muy pendientes, o se os quemará. Cuando haya tomado color ámbar, lo sacáis del fuego y lo vertéis en el molde o flanera que hayáis elegido. Ya os indico arriba el que yo he utilizado, pero utilizad el que más os guste.

Para cocinarlo, ponemos una cazuela al fuego con agua e introducimos el molde con el agua aún fría, al empezar a hervir bajamos el fuego a la mitad, y dejamos cociendo aproximadamente sobre una hora. Antes de sacarlo comprobad con un palillo o un pincho si está cocido (si sale limpio, ya lo podréis sacar del fuego). 

Dejad enfriar a temperatura ambiente y después a la nevera hasta la hora de servirlo.

Eviña's World

domingo, 18 de enero de 2015

La tercera velocidad

Publicado en La Voz de Galicia el 18 de enero de 2015 (Edición de Ourense)
http://www.lavozdegalicia.es/noticia/ourense/2015/01/18/tercera-velocidad

Aunque sea políticamente incorrecto, está claro que existen dos -o incluso tres- velocidades en la economía. Las de primera categoría son aquellas que ya empiezan a ver mejoras y una posible salida de la crisis, los famosos brotes verdes. Después están las economías periféricas, como Galicia, que serían de segunda velocidad y, finalmente, las provincias interiores de esas zonas periféricas, como Ourense y Lugo, en las que en muchos casos parece que ni siquiera existe la velocidad.

La evolución económica de Ourense siempre ha tenido cierto retraso respecto a nuestros vecinos costeros y también respecto a los grandes centros industriales nacionales. Un claro ejemplo está en la llegada tardía de los efectos de la crisis en la provincia, casi dos años después de que lo hiciera en las grandes zonas industriales. En su momento parecía una ventaja pero ahora vemos que al final a Ourense también llegó, y por desgracia, está tardando más de lo que querríamos en irse.

En clara lógica, una provincia como Ourense con una muy débil estructura industrial y donde el núcleo empresarial principal es la micro empresa y los autónomos, herramientas como la declaración de concursos de acreedores, para afrontar las dificultades económico-financieras de las empresas, han sido claramente menos utilizadas en todo este tiempo que en otros territorios.

Al fijarnos en el dato de empresas concursadas a lo largo del ejercicio del 2014 y compararlo con lo ocurrido en años anteriores, vemos que existe una muy ligera reducción. La gran duda está en saber si esa disminución fue debida al aumento en la velocidad de la economía ourensana, gracias al efecto de las políticas de activación económica e internacionalización, tan anunciadas por nuestros dirigentes, y al arrastre de nuestro vecinos más industriales. O en su defecto, que cuando un territorio con una tan débil capacidad industrial y empresarial, que se encuentra casi en fase de estancamiento económico, y que lleva varios años concursando empresas, llega un momento en el que donde no hay, ya no se pueden concursar.